AUTOR : Lic. Sebastian Domingo Gudiño Torrez
Mantenernos en buena forma no solo nos ayuda a disfrutar de una vida sana sino que al hacer ejercicios antes de estudiar o después ayuda a desconectar y a generar un cansancio físico que equilibre la saturación mental.
En épocas de exámenes el estrés puede perjudicar a nuestro organismo, estudiar y hacer deporte es algo estupendo para mantener la atención a raya y darle una pausa al cerebro en esos periodos de concentración intensa.
Practicar algún tipo de actividad física de forma regular es la forma ideal de reducir los niveles de estrés y ansiedad generados durante la época de los exámenes, además de mejorar el nivel de concentración y rendimiento.
Mejora tu rutina de estudios gracias al ejercicio físico participando en una clase dirigida de un gimnasio, jugando un partido con los amigos o dedicando unas horas al día al deporte que más te guste y si es al aire libre mejor.
Los beneficios de la actividad física de forma habitual y especialmente en época de exámenes están más que demostrados. De hecho los mejores expedientes académicos pertenecen a unos que practican deporte a diario.
Estudiar y hacer deporte es una combinación que funciona ya que el deporte desarrolla el funcionamiento cognitivo, ayuda a reducir la ansiedad y potencia valores como la constancia, el esfuerzo, la autogestión de capacidades y el autocontrol.
Es importante considerar ambas actividades como imprescindibles y reservar un tiempo determinado en las tareas diarias para desarrollarlas de forma correcta. Marcar en tu agenda diaria el tiempo dedicado a los estudios y el tiempo dedicado a la práctica deportiva te ayudará a cumplir en ambas partes y que una beneficie a la otra.
Obviamente una práctica deportiva muy intensa puede agotar todas las energías y dificultar la concentración pero un desayuno saludable con alimentos que estimulen el cerebro, una obra de deporte y el momento relajante de la ducha pueden ser un escenario propicio para una jornada de estudios.
Así pues si quieres saber si es mejor hacer ejercicio antes o después de estudiar deberás probar qué rutina te funciona mejor o combinar ambas actividades a tu gusto en diferentes momentos del día, ahora que ya conoces los beneficios de estudiar y hacer deporte no hay excusas para sacar el máximo partido a tu capacidad intelectual y física.